El truco definitivo para conservar embutidos y evitar que se sequen o pierdan sabor
Descubre los mejores métodos caseros para mantener jamón, chorizo, lomo y salchichón frescos durante más tiempo sin que se estropeen
Alicia Romero | 18/02/2025
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La calidad y curación de los embutidos ibéricos, como jamón, chorizo, lomo y salchichón, requieren técnicas naturales de conservación para mantener su sabor, textura y propiedades. Para ello, es fundamental conocer los mejores trucos caseros según el estado del producto: entero, empezado o loncheado.
10 CONSEJOS PARA CONSERVAR EMBUTIDOS EN CASA
Los expertos recomiendan distintas formas de conservación según el tipo de embutido y su estado:
- Si el embutido está sin abrir y tenemos varias piezas, es importante colgarlas separadas para que el aire circule entre ellas y evitar que se toquen.
- El almacenamiento debe ser en un lugar oscuro, seco y bien ventilado, sin exposición directa a la luz solar, ya que esta puede alterar sus propiedades.
- La temperatura ambiente ideal se encuentra entre 15 y 20 °C, evitando cambios bruscos que puedan afectar su conservación.
- Si la pieza ya se ha empezado, se recomienda mantenerla colgada con la parte cortada hacia abajo, minimizando la exposición al aire.
- Para evitar que la zona de corte se seque, puedes untarla con aceite de oliva y cubrirla con film transparente o papel de aluminio, asegurando que no entre aire. También se puede cubrir con sal, que absorbe la humedad, y luego tapar herméticamente.
- Mantener la piel o tripa original del embutido es clave, ya que actúa como barrera protectora. En embutidos como chorizo, salchichón o lomo, no se debe retirar hasta el momento de consumirlo. Si la pieza está empezada, se puede reutilizar la tripa para cubrir la zona expuesta.
- Para conservar el jamón una vez loncheado, se recomienda colocar un trozo de grasa del propio jamón sobre la zona cortada, seguido de la corteza retirada al inicio. Esta doble capa ayuda a evitar que la carne se seque y se oxide. Además, se debe cubrir con un trapo de algodón seco para mantener su frescura.
- No se recomienda guardar el embutido ibérico en la nevera, a menos que la temperatura ambiente supere los 25°C. En este caso, es importante sacarlo del frigorífico con antelación antes de consumirlo, para recuperar su textura y sabor original. Si el embutido se ha endurecido, se puede envolver en un paño de algodón húmedo y escurrido durante un breve periodo de tiempo.
- Si el embutido está cortado en rodajas, se puede conservar formando una torre y envuelto en film transparente, asegurando un sellado hermético. Antes de consumirlo, es recomendable sacarlo unas horas antes, dejándolo atemperar dentro del plástico y, justo antes de servirlo, emplatarlo para que sude y recupere su aroma y textura.
- El embutido ibérico loncheado y envasado al vacío se puede conservar en un lugar fresco y seco sin necesidad de refrigeración. Una vez abierto, lo ideal es consumirlo rápidamente. Si sobra, se debe envolver en film transparente y guardarlo en la nevera, siguiendo el método anterior.
POR QUÉ ES IMPORTANTE UNA BUENA CONSERVACIÓN
Aplicar correctamente estas recomendaciones es fundamental para mantener la calidad y el sabor original de los embutidos ibéricos. Un buen almacenamiento no solo evita que los productos se echen a perder, sino que también prolonga su vida útil, permitiendo disfrutar de ellos en óptimas condiciones durante más tiempo.