Alertan de una "pérdida alarmante" de arena en las playas de Can Picafort
Las asociaciones hoteleras también han señalado que la playa de Alcúdia está sufriendo un "exceso desmesurado" de arena acumulada
Redacción | 23/01/2025
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Las asociaciones hoteleras de Alcúdia y Can Picafort han mostrado su preocupación ante la rápida y exponencial degradación de los arenales de la bahía de Alcúdia, causada por los efectos del cambio climático. Este problema afecta tanto al medioambiente como a la sostenibilidad del turismo en la zona.
PÉRDIDA DE ARENA EN CAN PICAFORT Y ACUMULACIÓN EN ALCÚDIA
Los hoteleros han señalado una "pérdida alarmante" de arena en las playas de Can Picafort, mientras que la playa de Alcúdia sufre un "exceso desmesurado" de arena acumulada. Este desequilibrio no solo afecta a las playas, sino que también tiene un impacto negativo en los humedales de la Albufera, incrementando el riesgo de inundaciones en toda la zona.
El presidente de las asociaciones hoteleras, Pablo Riera-Marsà, ha advertido de la urgencia de actuar para frenar esta situación: "Cada día que pasa, las consecuencias de esta degradación avanzan. No solo está en juego la imagen turística de la bahía de Alcúdia, sino también la seguridad de los ecosistemas y de las personas que viven y trabajan aquí".
SOLUCIONES LIDERADAS POR EXPERTOS Y CIENTÍFICOS
Desde las asociaciones han insistido en que las soluciones deben ser lideradas por expertos, técnicos y científicos, quienes pueden aportar conclusiones fundamentadas para afrontar este problema. "Es hora de priorizar el medioambiente como base para garantizar un turismo responsable y de calidad. Alcúdia y Can Picafort son referentes turísticos que no pueden permitirse ignorar este problema", han afirmado los hoteleros.
COMPROMISO DE LAS ADMINISTRACIONES EN FITUR
En el marco de Fitur 2025, los hoteleros han valorado positivamente las reuniones mantenidas con las administraciones, que se han comprometido a firmar un protocolo de actuación en colaboración con entidades y representantes hoteleros. Este protocolo estará orientado a implementar medidas urgentes y coordinadas para frenar la degradación de los arenales y adaptarse a los retos del cambio climático.
UN PUNTO DE INFLEXIÓN PARA ABORDAR EL PROBLEMA
Riera-Marsà ha destacado que este compromiso de las administraciones supone un "punto de inflexión" para abordar la problemática de forma seria y coordinada. "Se sabe que los efectos del cambio climático son los principales responsables de esta situación, y es una obligación trabajar conjuntamente con las instituciones para minimizar su impacto y proteger los recursos naturales".