Militares denuncian que la Pascua Militar llega sin mejoras en sus condiciones laborales

La Asociación Profesional de Suboficiales de las Fuerzas Armadas (Asfaspro) denuncia que la Pascua Militar, que tradicionalmente invita a un balance sobre el estado de las Fuerzas Armadas, llega este año sin novedades significativas ni avances sustanciales en lo que respecta a la mejora de las condiciones de trabajo del personal militar.

"A pesar de los esfuerzos sacrificados de miles de hombres y mujeres que componen las Fuerzas Armadas, la ministra de Defensa, Margarita Robles, parece seguir priorizando otros intereses a costa de quienes día tras día ponen su esfuerzo y dedicación al servicio de la nación".

El texto de la crítica es claro: "mientras el personal militar arriesga su bienestar en situaciones de emergencia, como la recuperación de las zonas afectadas por la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) hace dos meses, las promesas gubernamentales no se traducen en mejoras concretas".

"La ministra Robles sigue sin tratar las condiciones laborales del personal en el Consejo de Personal, ignorando problemas como los turnos excesivos, la calidad de los alojamientos, y las paupérrimas retribuciones. Al mismo tiempo, se destinan miles de millones a nuevos proyectos materiales, como la construcción de submarinos, sin prever la escasez de personal capacitado para operar dichos equipos".

La escasez de personal militar es una preocupación crónica. En los últimos años, las Fuerzas Armadas han perdido más de 10.000 efectivos: "La carencia de médicos militares, el difícil acceso a vacantes por parte de los suboficiales y las plazas de tropa que quedan vacías son solo algunos de los problemas estructurales que las Fuerzas Armadas arrastran. Sin embargo, la respuesta del Ministerio sigue siendo la misma: palabras vacías. A lo largo de su mandato, Robles no ha presentado ninguna iniciativa legislativa sustancial para mejorar la situación del personal militar".

Además, lamentan que el trato al personal militar parece estar anclado en un modelo anticuado que no favorece el reclutamiento, especialmente en una sociedad que demanda profesionales mejor tratados y remunerados. Un ejemplo claro de esta disparidad es la reciente diferencia de compensación entre los soldados de la Policía Militar y los guardias civiles, quienes realizaron tareas similares durante el Día de las Fuerzas Armadas. Mientras que los primeros recibieron una compensación considerablemente inferior, además de estar alojados en condiciones precarias, los guardias civiles disfrutaron de una estadía en un hotel con mayor comodidad y libertad.

"La realidad es que, a pesar de su disposición constante a intervenir en situaciones extremas, los militares continúan siendo el último recurso sin las condiciones mínimas para desempeñar su labor de manera adecuada. Las carencias en recursos básicos durante los despliegues en zonas afectadas por la DANA fueron evidentes, con los propios afectados que tuvieron que depender de la ayuda de particulares y de ayuntamientos para paliar necesidades urgentes".

Frente a esta situación, reclaman un cambio de rumbo en la gestión del personal militar en España. "La carrera militar, la formación, las condiciones laborales y las retribuciones requieren una revisión profunda si se quiere evitar una mayor fuga de talento y asegurar que las Fuerzas Armadas del futuro puedan seguir cumpliendo con su misión. Sin un golpe de timón en estos aspectos, la gestión actual solo conducirá a la pérdida continua de personal cualificado que, en un futuro cercano, será esencial para la seguridad del país".