El Govern muestra a Aena su preocupación por la salud de los trabajadores del aeropuerto de Palma

La Secretaría autonómica de Trabajo, Empleo y Diálogo Social y el Instituto de Seguridad y Salud Laboral (IBASSAL) mostraron hoy a Aena su preocupación ante las denuncias recibidas del sindicato Comisiones Obreras por la situación de inseguridad de los trabajadores del aeropuerto de Palma debido a las obras de reforma que se están llevando a cabo en las instalaciones.

Catalina Cabrer, secretaria autonómica, ha explicado: “Estamos muy preocupados. La salud y la seguridad laboral son claves para este Govern, por lo que ante cualquier denuncia de este tipo, que puedan poner en riesgo la seguridad de las personas trabajadoras, activamos el protocolo para poner solución de forma lo antes posible desde el diálogo”.

Y ha añadido: "Hemos instado a Aena a que tomen las medidas necesarias para llevar a cabo una reunión con el comité de seguridad y salud y los delegados de prevención para verificar los sistemas de seguridad y aplicar las medidas necesarias en beneficio de los trabajadores del aeropuerto".

Además, el director del IBASSAL, Óscar Paz, ha recordado que desde el Ibassal se está trabajando en la seguridad y salud laboral en las empresas: “durante estos meses de invierno estamos llevando a cabo una campaña de siniestralidad, y además, hacemos visitas a las empresas para verificar que se adecuan al Real Decreto que recoge estas temperaturas”.

En este sentido, Óscar Paz ha remarcado: “Ibassal tendrá especial atención a la prevención ante las altas temperaturas en el aeropuerto. Durante los meses de verano lanzamos una campaña de actuación con el fin de velar por la salud, la prevención y el bienestar de las personas trabajadoras frente a las elevadas temperaturas que puedan provocar efectos negativos en la salud”.

TRABAJADORES: "NO PODEMOS MÁS. ESTO ES INSOPORTABLE"

Los trabajadores de la terminal de facturación del aeropuerto de Palma, dicen, no pueden más ante las obras de remodelación que se extienden por gran parte de las instalaciones. "Llevamos un mes trabajando entre polvo, suciedades, ruidos, aguas fecales procedentes de tuberías rotas y con desprendimientos de objetos que obligan a cerrar espacios abiertos y provocan accidentes y más de un susto", expuso hace varias semanas a Crónica Balear Caty Llorens, empleada de la compañía Ground 2 air y delegada de prevención de la misma.

"No nos merecemos trabajar en estas condiciones. Aena nos tiene abandonados y prefiere rapidez en acabar las obras a hacerlo en dos tandas, primero la zona norte y luego la sur para prevenir todas las incidencias que ahora estamos sufriendo", critica Llorens.

Desde principios de diciembre, ante el acercamiento del inicio de la temporada turística de Semana Santa, las labores se han intensificado. Pese a que Aena y la empresa concesionaria firmaron un acuerdo para evitar molestias, comprometiéndose a llevarlas a cabo en horario nocturno y finalizar a las seis de la mañana. Sin embargo, los trabajadores denuncian que esto no se está cumpliendo: "Trabajan cuando les da la gana", entorpeciendo en muchas ocasiones el funcionamiento habitual.